El virus del papiloma humano (VPH) es una enfermedad que afecta a millones de mujeres en todo el mundo, siendo responsable del 99% de los cánceres de cérvix, convirtiéndose en el cuarto tipo de tumor más frecuente en mujeres a nivel mundial.
La prevención juega un papel crucial en la lucha contra esta enfermedad, a través de la vacunación y pruebas de citología y VPH. La infección por VPH es la principal causa de cáncer cervical, por lo que es fundamental tomar medidas preventivas para combatirla.
La vacuna del VPH ha demostrado ser efectiva en la prevención del cáncer cervical, con la vacuna nonavalente reduciendo la incidencia hasta en un 73%. Es importante conocer los síntomas del cáncer cervical y realizar pruebas de detección temprana para un diagnóstico oportuno.
El cáncer cervical se presenta principalmente en mujeres mayores de 30 años, siendo poco común en personas menores de 25 años. El diagnóstico se realiza a través de citología y pruebas de VPH, seguido de tratamientos adaptados al estadio de la enfermedad.
Durante los tratamientos, es importante proteger la fertilidad y seguir medidas de prevención, como el uso adecuado del preservativo para evitar la exposición al VPH. La concienciación y la prevención son clave en la lucha contra el cáncer cervical, una enfermedad que afecta a mujeres de todas las edades en todo el mundo.