El satélite Cheops de la ESA descubre una gloria en un exoplaneta a 637 años luz de distancia
El satélite Cheops de la Agencia Espacial Europea (ESA) ha realizado un descubrimiento histórico al encontrar por primera vez señales de una gloria en un exoplaneta ubicado a 637 años luz de la Tierra. Las glorias son fenómenos ópticos similares a los arcoíris que solo se habían observado en la Tierra y en Venus, por lo que este hallazgo es verdaderamente excepcional.
El exoplaneta en cuestión, WASP-76b, es un planeta ultracaliente que se asemeja a Júpiter y tiene temperaturas extremadamente altas, lo que provoca lluvias de hierro fundido en su superficie. Los datos recopilados sugieren que la gloria en este exoplaneta es única debido a las condiciones peculiares que se requieren para su formación.
Los científicos han observado un brillo inusual en WASP-76b, indicando la posible presencia de una reflexión anisotrópica que se asemeja al efecto de gloria. Este fenómeno podría ser causado por la existencia de nubes formadas por gotas de agua esféricas y estables en el tiempo.
Este hallazgo no solo proporciona información valiosa sobre el exoplaneta en sí, sino que también permitirá a los investigadores estudiar otros fenómenos difíciles de detectar en planetas fuera de nuestro sistema solar. Además, aumenta nuestro conocimiento sobre la habitabilidad en otros mundos y nos acerca un paso más a comprender la diversidad y complejidad del universo.
Con este emocionante descubrimiento, el satélite Cheops continúa marcando pauta en la exploración espacial y demostrando el valor de la colaboración internacional en la búsqueda de respuestas a los misterios del cosmos.