Un indicador importante de la actividad económica de China retrocedió a una zona de contracción en noviembre después de un breve repunte en octubre. Aunque la presión por el lado de la oferta ha disminuido, la demanda sigue siendo débil.
El Índice de Gerentes de Compras de Manufactura de Caixin China de noviembre es un indicador privado de la actividad mensual del sector: fue de 49,9 en el mes, ligeramente por debajo del umbral de 50 puntos que separa la contracción de la expansión.
Ayer, el PMI oficial del país publicado por la Oficina Nacional de Estadísticas fue 50,1. El PMI oficial presta más atención a las actividades de las grandes empresas estatales y, en general, es más optimista que el Índice Caixin.
Al igual que el índice oficial de gerentes de compras, los datos de Caixin mostraron que la escasez de energía que tuvo un impacto en la economía en octubre disminuyó, proporcionando un ligero impulso a la producción, que aumentó por primera vez en cuatro meses. Caixin dijo que las presiones inflacionarias también se han aliviado “significativamente”, con los precios subiendo al ritmo más lento en más de un año.
Pero el aumento de la producción se vio compensado por la disminución de los nuevos pedidos. El fabricante también despide por cuarta vez en unos meses.
“La oferta de fabricación se recuperó, mientras que la demanda se debilitó. La relajación de las restricciones del lado de la oferta, especialmente el alivio de la contracción de la energía, aceleró el ritmo de recuperación de la producción”, dijo Wang Zhe, economista senior de Caixin Insight Group.
“Los responsables de la formulación de políticas deberían seguir centrándose en apoyar a las pequeñas y medianas empresas. También deberían centrarse en cuestiones como el deterioro del empleo, el crecimiento limitado de los ingresos de los hogares y el escaso poder adquisitivo de los bienes de consumo”.
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