Roglic recibió el maillot rojo de líder después de lanzar su ataque cuesta arriba en los últimos metros de LaGuardia en el País Vasco en un intento por ganar un cuarto título consecutivo sin precedentes en el Tour.
El piloto de Jumbo-Visma estuvo 13 segundos por detrás de su compañero de equipo estadounidense Sepp Kuss en el tiempo total. Roglic estaba 26 segundos por delante de Ethan Hayter de Ineos Grenadiers.
“Realmente es solo el comienzo de La Vuelta, pero es mejor estar 10 segundos por delante que estar por detrás”, dijo Roglic. “Ha sido un ritmo duro todo el día, etapas súper rápidas y duras. La final es una oportunidad de luchar por una victoria de etapa. Tengo piernas, así que lo intenté”.
El esloveno cruzó la meta por delante de Mads Pedersen de Trek-Segafredo y Enric Mas de Movistar. Fue el tercer segundo consecutivo para Pederson, quien fue derrotado por Sam Bennett en la segunda y tercera etapa.
Roglic consiguió su décima victoria de etapa en la general de la Vuelta. Su preparación para esta edición fue menos que ideal debido a una lesión por caída en el Tour de Francia, y su participación solo se confirmó unos días antes de la carrera.
El piloto de Ineos, Richard Carapaz, estaba 33 segundos detrás, mientras que Simon Yates de Bikeexchange-Jayco estaba 51 segundos detrás en general.
Las primeras tres fases se están llevando a cabo en los Países Bajos por primera vez después de que la pandemia de coronavirus frustrara los planes para comenzar en 2020.
Los pilotos se enfrentarán a cinco puertos de montaña en la quinta etapa de la carrera, que se completa en Bilbao el miércoles.
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