La periodontitis, o enfermedad de las encías, es una condición común en las personas de edad avanzada y es la principal causa de pérdida dental en los adultos. Esta enfermedad está estrechamente relacionada con enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares y diabetes, lo cual es especialmente preocupante en los ancianos debido a la propagación de bacterias a través del torrente sanguíneo.

Las bacterias presentes en la boca pueden llegar a las vías respiratorias, aumentando la susceptibilidad a enfermedades pulmonares como la neumonía, EPOC y bronquitis. En España, las personas mayores de 50 años representan el 75% de los trastornos bucodentales, siendo la falta de dientes, enfermedades de las encías y caries los problemas más comunes.

Los adultos mayores enfrentan desafíos específicos en cuanto a su salud bucodental, como el descuido de la higiene oral y la falta de energía para mantener hábitos como el cepillado regular. Además, el uso de ciertos medicamentos puede afectar la salud bucodental de los mayores, interfiriendo en la cicatrización y causando sequedad en la boca.

Para prevenir estas y otras complicaciones, se recomienda acudir regularmente al dentista, utilizar cepillos eléctricos, realizar una limpieza bucal con hilo dental y enjuague bucal, cuidar las dentaduras postizas y usar dentífricos para la sensibilidad dental. Además, se sugiere hacer enjuagues con soluciones salinas y bicarbonato, masticar bien los alimentos y mantener una ingesta adecuada de agua para evitar la sequedad bucal.

El adecuado cuidado bucodental en la tercera edad es esencial para garantizar una mejor calidad de vida y prevenir enfermedades sistémicas. Es común que las personas mayores recurran a la implantología y a los tratamientos de ortodoncia para recuperar la funcionalidad y mejorar la estética dental.

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La prevención y el acceso a los avances en odontología ofrecen varias ventajas para mantener una buena salud bucodental en las personas mayores. Seleccionar un plan de tratamiento adecuado y seguir las recomendaciones del dentista pueden marcar la diferencia en la calidad de vida de los ancianos. No hay que subestimar la importancia de una sonrisa sana y el impacto positivo que puede tener en la salud general y el bienestar de los ancianos.