El miércoles, segundo día de la visita del Papa Francisco a la República Democrática del Congo, una multitud de fieles que cantaban y bailaban asistieron a la misa papal en la República Democrática del Congo (RDC).
La gente acudió en masa a la pista del aeropuerto Ndolo de Kinshasa para una misa al aire libre programada para las 9:30 a. m. (08:30 GMT).
En esta gran ciudad de unos 15 millones de habitantes, muchos feligreses comenzaron a llegar al aeropuerto el martes por la noche para asegurarse un lugar.
Los 700 cantantes del coro ensayaron en un ambiente festivo mientras los fieles bailaban y ondeaban banderas mientras la multitud inundaba el aeropuerto en medio de un sol brillante y estrictas medidas de seguridad.
El Papa de 86 años llegó a la República Democrática del Congo el martes, la primera etapa de una gira de seis días por África que también incluirá Sudán del Sur.
Las multitudes inundaron las calles mientras Francisco pasaba, queriendo echar un vistazo al auto del Papa.
La República Democrática del Congo, una antigua colonia belga del tamaño del continente de Europa Occidental, es el país con mayor número de católicos en África. Las estadísticas oficiales del Vaticano sitúan el porcentaje de católicos en la República Democrática del Congo en un 49 por ciento.
Dirigiéndose a políticos y dignatarios en el palacio presidencial en Kinshasa el martes, Francisco denunció lo que él ve como “colonialismo económico” que está causando daños duraderos en la República Democrática del Congo.
“Este país ha sido saqueado a gran escala y no se está beneficiando plenamente de sus vastos recursos”, dijo, provocando aplausos.
A pesar de sus ricas reservas minerales, la República Democrática del Congo es uno de los países más pobres del mundo. Alrededor de dos tercios de los congoleños viven con menos de $ 2 por día, según el Banco Mundial.
El agitado este de la República Democrática del Congo ha estado plagado durante mucho tiempo por decenas de grupos armados. Desde finales de 2021, los rebeldes del M23 también se han apoderado de una gran franja de territorio en el este de Kivu del Norte, cerca de su capital, Goma.
El viaje a la República Democrática del Congo y Sudán del Sur estaba originalmente programado para julio de 2022, pero se pospuso porque el Papa tuvo que usar una silla de ruedas en los últimos meses debido a dolores en la rodilla.
El viernes, el Papa viajó a Juba, la capital de Sudán del Sur.
La actual visita papal al extranjero es la 40ª de Francisco desde que fue elegido en 2013.
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