Después de una cumbre de cuatro noches, los Veintisiete han dado luz verde al primer paquete masivo de estímulos para hacer frente a la pandemia. La UE ya tenía sobre la mesa un primer conjunto de préstamos de emergencia por hasta 420,000 millones de euros que se desplegarán este otoño. Lo que se aprobó temprano este martes por la mañana constituye una batería de nuevas inversiones que harán que la economía europea despegue después del colapso esperado este año. Estas son las claves de lo que se negoció anoche.
1. Deuda. La Comisión Europea irá a los mercados para endeudarse por 750,000 millones de euros. Esta emisión de bonos, que se limitará en 2026, ya causó renuencia entre los halcones, por lo que se establece que su único propósito es enfrentar las consecuencias de la crisis de covid-19.
2. Tamaño. El fondo tendrá un tamaño de 750,000 millones de euros. A pesar de los esfuerzos de los llamados países frugal al empequeñecerlo, ha terminado manteniendo el mismo volumen que propusieron la Comisión Europea y el Presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. Sin embargo, la composición del instrumento ha cambiado: el 90% de los recursos van al fondo de recuperación y resiliencia (FRR), que debe financiar las inversiones y reformas que los países presentan a Bruselas. El fondo para salvar empresas, sin embargo, ha desaparecido. Por su parte, el Presupuesto de la UE para el período 2021-2027 tendrá el volumen propuesto por Michel: 1.074 millones de euros.
3. Subvenciones y préstamos. El equilibrio entre donaciones y préstamos ha cambiado de la propuesta inicial. La Comisión predijo que 500,000 millones se articularían a través de ayuda (66%) y 250,000 a través de préstamos (33%). Los países más reticentes, especialmente los Países Bajos y Suecia, se negaron a dar subsidios, mientras que Francia y Alemania no querían caer por debajo de los 400 mil millones de euros. Sin embargo, ambas partes han cerrado la cifra de 390,000 millones de euros en donaciones (52% del total) y 360,000 en préstamos (48%).
4. La llave de la caja. Una vez que se aceptó la distribución de los subsidios, los Países Bajos querían una especie de derecho de veto para obligar a los países receptores, especialmente España e Italia, a llevar a cabo reformas estructurales. Los veintisiete han acordado un freno de emergencia, aunque será necesario ver cómo se aplica. Los planes nacionales de inversión y reforma serán evaluados por la Comisión y aprobados por mayoría cualificada en el Consejo. Si pasan estos dos filtros, los fondos se desembolsarán al país. Luego, la Comisión solicitará al Comité Económico y Financiero que evalúe el cumplimiento de esos programas para que la Comisión continúe desembolsando dinero. Estos últimos tratarán de buscar el consenso, pero si “excepcionalmente” uno o más países creen que hay “desviaciones”, pueden solicitar que el asunto sea llevado al Consejo Europeo.
5. Condicionalidad. El documento establece que los planes serán evaluados por la Comisión y deben ser consistentes con las recomendaciones específicas formuladas por el Ejecutivo comunitario (reformas que van desde la esfera laboral hasta la educación o el ingreso mínimo), el crecimiento potencial, la creación de empleo, social y económica. resiliencia y transiciones verdes y digitales.
6. Cheques. Cinco países (Alemania, Países Bajos, Suecia, Austria y Dinamarca) mantendrán un descuento en su contribución al presupuesto de la UE, a pesar de la intención inicial de Bruselas de eliminar todos los cheques. Michel ofreció a estos cinco países 6.479 millones de euros al año con contribuciones del resto de los socios. Al final, tuvo que aumentar los de los cuatro halcones, para que juntos los cheques llegaran a 7,603 millones.
7. Distribución de dinero. Los fondos se dividirán en dos lotes en respuesta a las demandas, especialmente de los países del este. El 70% se desembolsará en 2021 y 2022 de acuerdo con los criterios de distribución establecidos por la Comisión Europea. El 30% restante se pagará en 2023, reemplazando el criterio de desempleo establecido por el Ejecutivo de la Comunidad para la caída del PIB en 2020 y la pérdida acumulada en el período 2020 y 2021. Con esto, los países orientales esperan reducir el peso del tasa de desempleo en el reparto y los fondos de cero al sur. Como regla general, ningún país tomará prestado más del equivalente al 6,8% de su ingreso nacional bruto.
8. Nuevos recursos. Para pagar la deuda, los socios acuerdan buscar nuevas fuentes de ingresos. Específicamente, el documento se refiere a un impuesto sobre los plásticos no reciclados que entraría en vigencia el 1 de enero de 2021; un mecanismo de ajuste de carbono en la frontera que se diseñará en el primer semestre del próximo año y una tarifa digital, que se introducirá a más tardar el 1 de enero de 2023. El Consejo invita a la Comisión a hacer una propuesta revisada para el sistema de comercio de carbono, que puede ser se extendió a la aviación y al sector marítimo, e incluso se habla de un posible impuesto sobre las transacciones financieras.
9. Estado de derecho. Esta sección está descafeinada después de la última versión. En la propuesta del sábado, se afirmó que se introduciría un régimen de condicionalidad para abordar “las deficiencias generales manifiestas” en la gobernanza de los países miembros con respecto al estado de derecho. Esa expresión alentó al primer ministro húngaro, Viktor Orbán. El documento final dice: “El Consejo Europeo subraya la importancia del respeto del estado de derecho”. El texto menos extenso agrega que la Comisión puede proponer medidas que pueden ser aprobadas en el Consejo por mayoría cualificada.
10. Las víctimas de la negociación. La negociación ha matado algunos fondos y proyectos recaudados por la Comisión Europea. El fondo para rescatar empresas (26,000 millones que tuvieron que movilizar hasta 300,000 millones) o el programa de salud (7,700 millones) desaparecen. Pero el Fondo de Transición Justa (de 30,000 a 10 mil millones), que fue para reconvertir antiguas regiones mineras, o el programa de innovación Horizon Europe (de 13,5 a 5 mil millones) también se reducen.
Experiencia en periódicos nacionales y periódicos medianos, prensa local, periódicos estudiantiles, revistas especializadas, sitios web y blogs.
Publicado por Telegraph, Guardian, Metro, Independent, The Debrief, VICE, Femail Online, Inside Housing, Press Association, Open Democracy, i-D, la revista Your Cat, Mumsnet y más.