La reciente celebración del Mundial de Fútbol Femenino ha generado una serie de reacciones, en particular debido a un incidente que ha causado controversia. Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol, fue objeto de críticas después de que se le viera besando a Jenni Hermoso de manera aparentemente forzada durante una entrevista.

La actriz Anabel Alonso no tardó en criticar este hecho a través de su cuenta de Twitter. No obstante, algunos usuarios de redes sociales le recordaron un episodio ocurrido hace algún tiempo, cuando Alonso besó al chef Jordi Cruz en el programa de televisión Masterchef Celebrity. Estos internautas acusaron a la actriz de tener una doble moral al condenar el beso de Rubiales mientras ella misma protagonizó un acto similar en televisión.

Ante las críticas, Anabel Alonso salió al paso y declaró que toda esta polémica es inventada y que se trata simplemente de entretenimiento y ficción. Además, la actriz también aprovechó la ocasión para criticar a los medios de comunicación por mezclar diferentes temas y confundir a la opinión pública.

Xavier Deltell, compañero de Alonso en Masterchef, salió en su defensa argumentando que en el programa siempre ha habido un ambiente familiar y amistoso, donde los besos entre los participantes son comunes. El presentador destacó que estos gestos forman parte de la dinámica del programa y no deben ser interpretados como conductas inapropiadas o forzadas.

En resumen, el beso forzado de Rubiales a Jenni Hermoso ha generado reacciones diversas. Mientras algunos condenan el incidente, otros aprovechan la oportunidad para señalar la hipocresía de ciertas personalidades. La actriz Anabel Alonso ha defendido su beso anterior argumentando que se trata de entretenimiento, mientras que su compañero en Masterchef ha respaldado esta postura al subrayar que los besos forman parte de la dinámica del programa. En definitiva, este episodio pone de manifiesto la importancia de reflexionar sobre el contexto y las intenciones detrás de un gesto antes de emitir juicios precipitados.