Por Sergio Ángeles. La cadena de tiendas del Grupo Famsa tiene deudas totales de 19 mil 715 millones de pesos y solo tiene 16.9 millones en efectivo o equivalentes. Su acreedor individual más importante es el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), institución del gobierno federal, que le debía 3 mil 380 millones de pesos al 30 de junio y con la que admitió estar en mora.

Del total de la deuda, 8 mil 589 millones de pesos, el 43,5 por ciento, se debe a 14 entidades relacionadas del mismo grupo, incluido Banco Famsa, liquidado por el Gobierno en julio.

Lo anterior señaló la empresa en la solicitud de concurso mercantil que presentó este jueves en Monterrey, en paralelo a una petición para homologar este trámite ante el Tribunal de Quiebras del Distrito Sur de Nueva York, de tal manera que sus activos en Estados Unidos también están protegidos.

La deuda de Famsa está compuesta por 9 mil 967 millones de pesos en pasivos bancarios y financieros, 85,5 millones de pesos en arrendamientos financieros y 8 mil 589 millones en “cuentas por pagar con partes relacionadas”.

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La deuda bancaria incluye dos emisiones de bonos, con un saldo vivo de 140 millones de dólares, en las que también se ha producido un impago.

En cuanto al activo, solo hay 16.9 millones de pesos en efectivo, cuentas por cobrar a partes relacionadas por 5 mil 450 millones de pesos y préstamos comerciales por 241 millones de pesos, por un total de 5 mil 708 millones, o 29 por ciento en relación al pasivo.

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Para que la quiebra sea admitida a trámite, Famsa tiene que demostrar que sus pasivos son más del doble de sus activos y que ha incumplido en el pago de más del 35 por ciento de sus deudas.

La empresa afirmó, ante el juez federal de Monterrey que revisará su demanda, que no ha realizado pagos por 17 mil 884 millones de pesos, aunque ese monto incluye lo que no se paga a sus vinculados. Será hasta la semana próxima cuando el juez a quien corresponda Una vez entregado el caso, decidirá si admite la demanda y si otorga medidas cautelares para frenar las acciones de los acreedores contra Famsa, que cuenta con 379 tiendas en México y 22 en los Estados Unidos.

Si se tramita la quiebra, Famsa buscará un acuerdo con sus acreedores a través de un conciliador, pero estará en riesgo de quiebra si no hay acuerdo.

En Nueva York, el caso ya fue cedido a la jueza Shelley Chapman, quien en junio pasado se enteró de una solicitud de Famsa para reestructurar una fianza por 59 millones de dólares.

Esa solicitud fue cancelada luego de la liquidación de Banco Famsa, y ahora Grupo Famsa solo solicita que su quiebra en México sea aprobada en Estados Unidos, bajo el Capítulo 15 de la Ley de Quiebras de ese país.